Detectada por primera vez Hypoderma actaeon, una miasis emergente en los corzos españoles
Enmarcado dentro
del Convenio de Colaboración que la Asociación del Corzo Español tiene suscrito con
el INVESAGA de la
Universidad de Santiago de Compostela para el seguimiento
sanitario de los corzos españoles, a principios de este año se detectaba un
nuevo parásito en animales procedentes de la España Central.
Tras un estudio pormenorizado de las muestras tomadas por colaboradores de la ACE , se ha determinado que se
trata de Hypoderma actaeon, una larva
subcutánea de un díptero Oéstrido, que provoca intensas reacciones hemorrágicas
bajo la piel de los corzos infectados. Además de los posibles efectos adversos
que, en combinación con otras parasitosis, pueden provocar en la demografía de
la especie, la peculiaridad de esta nueva afección detectada, es que H. actaeon, hasta la fecha sólo estaba
descrita en ciervo (Cervus elaphus)
y, esporádicamente, en gamo (Dama dama).
Probablemente, una inadecuada gestión que está permitiendo altas densidades de
ciervos en la España
central, ha favorecido la presencia de este parásito en el medio natural, y su
traspaso, ahora, a las poblaciones de corzo produciéndose esta infección
cruzada.
A diferencia del
oéstrido Cephenemyia stimulator, ya
presente en los corzos españoles desde hace más de una década, el ciclo de “la mosca de los barros” es sensiblemente
diferente en cuanto a la época del año en el que podemos detectar las larvas. La
mosca de Hypoderma vuela durante el
verano, depositando los huevos sobre el pelo del corzo. Las larvas recién
nacidas penetran a través de la piel y, tras una primera muda, realizan un
orificio cutáneo por el cual respiran. El mayor grado de infestación
corresponde al período otoño-invernal, momento más adecuado para detectar los
gusanos bajo la piel de los animales infectados.
Ante la aparición de
este nuevo parásito, la
Asociación del Corzo Español, en colaboración con el
INVESAGA, está trabajando para conocer el alcance real del proceso y poder
tomar las medidas adecuadas de gestión encaminadas a minimizar su influencia.
Así mismo, dentro del “Proyecto Oéstridos”, la ACE demanda la colaboración de todos los
cazadores para la detección de estos parásitos y su caracterización geográfica,
poniendo a disposición de todos los interesados unas fichas en su página web
(www.corzo.info) que ayuden a completar el alcance de esta nueva enfermedad
parasitaria.
Asociación del Corzo Español